Elisabeth Borne no piensa usar el 49.3 para aprobar la reforma
Ante la creciente oposición a su reforma de las pensiones, Elisabeth Borne explicó el jueves por la noche a France 2 el sentido de su proyecto, que no calificó de “justo” como dijo hasta ahora. Y por una buena razón: el gobierno fue criticado por usar este término en el momento de la presentación del proyecto, ya que las diferencias en la duración de las contribuciones se mantienen y aquellos que comienzan a trabajar más jóvenes tienen que contribuir por más tiempo al sistema. También se destacó la situación de algunas mujeres.
No se considera un 49.3
En cambio, Elisabeth Borne insistió en el “esfuerzo” necesario para convencer a los franceses. Aunque hubo una fuerte presión de la calle y el texto no consiguió la mayoría en la Asamblea Nacional, el presidente del Gobierno declaró que “no contempla la hipótesis” de un recurso al 49,3 para aprobar su reforma, empujando en particular a restablecer la jubilación edad de 62 a 64 años. Sin embargo, es difícil decir lo contrario, ya que el texto llegó el lunes en el hemiciclo. El gobierno y su mayoría aparecerán “políticamente débiles” del recurso al 49,3.
“Busco compromisos en este texto como en todo lo que he presentado al Parlamento”, respondió el primer ministro a France 2, mientras que el gobierno ya ha utilizado 49,3 diez veces para la adopción de textos presupuestarios.
Unas 20.000 enmiendas, incluidas casi 13.000 de la LFI, se han presentado para revisión de reforma, según supo AFP de fuentes parlamentarias. Marine Le Pen, líder de los diputados de RN, que presentaron más de 200, acusó a la alianza de izquierda Nupes de “bloquear” y “permitir que el gobierno aprobara la reforma (…) sin votación como lo permitía el trámite parlamentario”.
El ministro de Economía, Bruno Le Maire, por su parte, dijo estar “convencido” de que habría suficientes votos para votar por el texto, aunque admitió que una “mayoría se construyó, nunca se dio por adelantado. Todos los ojos están puestos”. sobre Les Républicains, que está dividida sobre la reforma y el apoyo al texto será posible que no pase por 49.3.
Sanciones
Elisabeth Borne reiteró la parte “necesaria” de la reforma “para salvar el sistema de pensiones”, aunque “no es fácil pedir a los franceses que trabajen poco a poco más”.
En cuanto al trabajo de las personas mayores, un aspecto importante de la reforma, Elisabeth Borne se mostró partidaria de “sancionar” a las empresas con “malas prácticas” en la contratación de personas mayores. En el tema del índice de empleo para adultos mayores que quiere poner el gobierno, Elisabeth Brtne piensa que podemos ir más allá (…) diciendo que las empresas cuyo índice muestra que no tienen buenas prácticas con respecto a los adultos mayores, deben implementar un plan de acción que obviamente será discutido dentro de la empresa”. “Y si no, o si no hay consecuencias para corregir los malos hábitos, puede haber sanciones”, agregó.
Edouard Philippe rompió su silencio
Antes de ser interrogada durante 35 minutos por la periodista Caroline Roux en el programa “L’Evénement”, Elisabeth Borne recibió el apoyo de Edouard Philippe, líder del partido aliado Horizons, quien manifestó su apoyo “sin ambigüedades al proyecto Acusado de no apoyar Bastante el Ejecutivo, este partidario de posponer la edad de inicio a los 65, 66 o incluso 67 años, ve a su grupo sembrando la confusión, amenazando algunos diputados con votar en contra o abstenerse.
Antes de esta reforma, el índice de confianza del Primer Ministro alcanzó su nivel más bajo desde su nombramiento con un 23% (-4 puntos), según una encuesta de Elabe realizada el martes y el miércoles. Después de una movilización récord el martes, con entre 1,2 y 2,7 millones de personas en las calles, seguida de dos nuevos días de acción la próxima semana, el gobierno dijo que “escuchó” y “comprendió” la ira francesa.
Pero el jefe de Gobierno también apretó la tuerca al decir el domingo que el aplazamiento del 64, confirmando el descontento, “ya no era negociable”. Esta rigidez expone posibles bloqueos en el país, que el 60% (+3 puntos en una semana) de los franceses “entienden”, según un sondeo de Elabe publicado este miércoles, mientras que el 71% se mantiene opuesto a la reforma.